Capítulo cuatro.
-Dulce Ilusión-
Una pequeña chispa se volvía a encender en mi ser.Una chispa de esperanza volvía a nacer dentro mío.Esa canción significaba mucho para mí, pero no estoy segura si fue dedicada a mí o no.
Confusión era lo que sentía en este momento. Justin no conoció a otra chica desde nuestro rompimiento, si no hubiera salido en las noticias como hoy.
Jasmine Villegas la nueva chica que logró conquistar a mi amado, va a mi ex amado.
La verdad me alegra que se vean felices juntos, lo que más quiero es verlo feliz no importa con quien si no es que este bien. Miles de chicas van a aparecer en su vida, más si es reconocido como lo es.
Dos golpes a mi puerta fue lo que me logró escapar de mis pensamientos. Me dirigí hasta ella y coloqué mi mano en el picaporte para lograr hacer un leve giro y abrir la puerta. Detrás de ella se encontraba Ryan con un plato de porcelana importada de color blanco con dos rebanadas de pizza, y una lata de soda dietética.
-_____ Toma te traje la cena, no se si vas a cenar con nosotros abajo o en tu cuarto,por eso te la traje hasta acá- Exclamó dulcemente
-Emm ...gracias Ryan no hacía falta, pero gracias-Dije para luego tomar el plato entre mis mano y llevarlo hasta mi escritorio.
Pensando que mi amigos se había ido,me di media vuelta y me dirigí hacia la entrada para cerrar la puerta,pero él seguía ahí. Era un momento incómodo lo tenía que admitir. Como no estaba de buen humor y no quería nada de nadie terminé cerrándole la puerta frente a su cara.
Gracias a dios no lo lastimé,pero no me importaba ya.Yo me sentía mal y merecía mi espacio personal.
Me tumbé boca arriba en mi suave cama y miré al techo.En ella se encontraba una foto nuestra.Era nuestra foto más dulce de todas.
Aparecíamos él y yo formando un gran corazón con nuestros brazos en medio de la playa. Como no acordarme de esa foto, era un momento mágico. Él me había confesado lo que sentía por mí. Ya éramos novios oficialmente, pero nunca me había dicho Te Amo como ese día.
No tardó en nublarse mi vista, eso significaba que le estaba dando espacio para que salieran mis lágrimas.
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